Following The Path of The Doctor

La semana pasada Blas estuvo de visita, así que abandoné por unos días el Camino del Doctor (vaya, que me pillé un par de días libres) para dedicarme a hacer algo de turismo. La cosa empezó bastante bien, con una visita al pueblo para ver algunas de las ruinas (los pocos edificios históricos que hay en esta ciudad están en ruínas debido a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial)
Y un viajecillo a Winchester (15 min en tren), que es una ciudad mucho más bonita, llena de edificios históricos, de calles animadas y suficientemente pequeña como para poder recorrerla en un día a pie.
Allí comimos en un agradable local tradicional donde servían cornish pasties
Bueno, o quizás no tan tradicional, si atendemos a los cuadros de piratas comiendo empanadillas, aunque eso sólo le daba al local un cierto aire pastafari(curiosamente se consideraba que llevar este tipo de comida al mar daba mala suerte...)
En todo caso, el sitio en cuestión tenía galerías con unas bonitas vistas a la calle principal (y a un monumento un poco raro)
Obviamente, como turistas de bien, fuimos a visitar la catedral
y el castillo, donde está la "Winchester Round Table"
Entre unas cosas y otras también aprovechamos para dar una vuelta por el mercadillo callejero y por las charity shops locales y nos volvimos a casa cansados (y con unas cuantas compras de utilidad dudosa)
El problema empezó al planear nuestra siguiente excursión ¿Londres u Oxford? Claramente nos decidmos por Oxford (2 votos a 0), comenzando así con lo que podríamos llamar nuestra RUTA FRIKI POR INGLATERRA o, más concretamente, SIGUIENDO EL CAMINO DE TOLKIEN.